Pais: Brasil

Fecha: 04 de Octubre del 2022

El pesticida encapsulado reduce la toxicidad en las larvas de pez cebra por Embrapa, Brasil

La nanoencapsulación puede ser más segura para especies no objetivo

Un equipo de científicos de Embrapa, Unesp y Unicamp probó la toxicidad de diferentes formulaciones de plaguicidas con acción insecticida. Actualmente, el equipo realiza pruebas con herbicidas. El equipo encontró que el insecticida encapsulado en un polímero natural tenía menor toxicidad ya que aumentaba la concentración requerida del compuesto para causar la misma toxicidad en los peces que el ingrediente activo (dimetoato) y no afectaba el comportamiento de las larvas. Por lo tanto, la nanoformulación que contiene dimetoato mostró el potencial de ayudar en la seguridad ambiental y alimentaria debido a su baja toxicidad.

Dado que existen muchos problemas toxicológicos con los pesticidas, mejorar las formulaciones para hacerlos más seguros puede ayudar a reducir sus efectos adversos.

Según la investigadora de Embrapa Meio Ambiente Vera Castro, en los últimos años, el uso de la nanotecnología ha mostrado un gran potencial para crear formulaciones y, con ello, mejorar la eficacia y la seguridad de los plaguicidas, además de reducir los efectos nocivos para el medio ambiente.

“Las fórmulas nanoencapsuladas utilizan una amplia variedad de nanomateriales, explica el analista José Vallim, de Embrapa Meio Ambiente. Por lo tanto, la nanoencapsulación de pesticidas puede proporcionar una cinética de liberación controlada del ingrediente activo al tiempo que aumenta de manera eficiente su permeabilidad, estabilidad y solubilidad”.

Según Leonardo Fraceto, del Instituto de Ciencia y Tecnología de la Unesp, las formulaciones que modifican el perfil de liberación de los principios activos prometen muchos beneficios con relación a los productos convencionales, como la reducción de la cantidad de principio activo necesaria para una determinada respuesta biológica debido a una mejor focalización organismos objetivo y también al disminuir el potencial de pérdidas por lixiviación y volatilización de los ingredientes activos.

Por otro lado, aunque mucho se discute sobre los posibles beneficios de las formulaciones de nanopesticidas, existe la preocupación de evaluar su seguridad en la aplicación agrícola ya que, al igual que con los productos convencionales, existe un riesgo potencial para los ambientes acuáticos debido a la liberación de los nanopesticidas. ingrediente activo y, como resultado, posible toxicidad para organismos no objetivo.

Por ello, explica Fraceto, para promover estrategias de desarrollo de productos más seguros y evaluar sus riesgos ambientales, es fundamental conocer su destino en el medio ambiente y en los organismos. En este sentido, las pruebas de ecotoxicidad son instrumentos utilizados en la evaluación de riesgos ambientales.

En otro estudio se analizaron dos formulaciones nanoencapsuladas a base de atrazina (un herbicida selectivo), una de ellas utilizando zeína, una proteína de grano de maíz que tiene la capacidad de formar películas flexibles biodegradables de bajo costo y tiene buenas propiedades para preparar nanopartículas.

Con nanoatrazina, se realizaron pruebas de toxicidad en varios organismos de diferentes niveles tróficos. También se realizaron pruebas de ecotoxicidad con la adición de materia orgánica que se encuentra ampliamente en el medio ambiente, incluido el acuático. El uso de materia orgánica tiene como objetivo hacer que las condiciones de prueba se acerquen lo más posible a las condiciones ambientales relevantes, un hecho que confirma que los nanopesticidas se pueden usar comercialmente de manera segura. Los resultados están siendo analizados y deberían publicarse pronto.

Estos estudios forman parte de un proyecto Agricultura, micro/nanotecnología y medio ambiente: de la evaluación de los mecanismos de acción a los estudios de transporte y toxicidad” financiado por la Fapesp (2017/21004-5), coordinado por el prof. Leonardo Fraceto. La obra publicada y de autoría de José Henrique Vallim, Zaira Clemente, Rodrigo Castanha de Embrapa Meio Ambiente, Anderson Pereira y Estefânia Campos de Unesp, Márcia Assalin de Embrapa Meio Ambiente, Cláudia Maurer-Morell de Unicamp, Leonardo Fraceto de Unesp y Vera Castro

Traducido del portugués.

Ver nota