Pais: El Salvador

Fecha: 07 de Mayo del 2018

Miembros de adescoptac preparan abono orgánico tipo bocashi con el apoyo de CENTA, El Salvador

Bajo la metodología de "Aprender Haciendo", extensionistas del Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal "Enrique Álvarez Córdova" (CENTA) a través de la agencia de Tacuba, llevaron a cabo, con los miembros de la Asociación Desarrollo Comunal Proyecto Tacuba (ADESCOPTAC) la práctica de cómo elaborar un abono orgánico tipo bocashi. La práctica fue realizada en la finca de ADESCOPTAC que funciona como Escuela de Campo, ubicada en el cantón San Rafael, municipio de Tacuba, departamento de Ahuachapán, lugar donde hay plantaciones comerciales como: naranja Valencia, mango Tommy y Haden, anona roja, banano y posteriormente tendrán papaya de la variedad "Red Lady". Rubén Darío Monterroza, técnico de la agencia CENTA Tacuba y responsable de desarrollar la práctica, argumentó que el bocashi es un abono que se obtiene de la fermentación de residuos orgánicos que se encuentran en los mismos materiales de desechos con los cuales se elabora. El bocashi ayuda a fertilizar los cultivos y al mismo tiempo a nutrir la tierra. "Este es un grupo que se dedica a la producción comercial de frutales y para el mes de junio estarán sembrando plantas de papaya de la variedad Red Lady, y el bocashi que están preparando es el que incorporarán en el suelo donde se establecerá el cultivo", explicó. Los materiales que utilizaron para su preparación fueron: tierra negra, estiércol (ganado, gallinaza o pollinaza), ceniza, pulimento de arroz, microorganismos líquidos, melaza y harina de roca que se encuentran en la finca. Materiales y procedimiento Para la elaboración de este abono orgánico se ocuparon 15 sacos de tierra negra, 15 sacos de estiércol, 3 sacos de ceniza,1 saco de Bocashi,1 saco de pulimento de arroz, 60 litros de microorganismos líquidos (3 cubetas) y 3 sacos de harina de roca, que hace un total de 37 sacos, es decir que los de ADESCOPTAC obtendrán la cantidad de 74 quintales para ser utilizado en el mes de junio. Su procedimiento fue extender un tercio de cada material siguiendo un orden, luego se coloca las capas en el mismo orden hasta un máximo de 1.2 metros de altura. Después de cada capa se humedece y se hace prueba de puño, luego se inicia la siguiente capa, hasta completarla con la tercera, luego se mezcla en forma homogénea, se deja el montón a una altura de 0.50 metros de altura a un máximo de 1.2 metros protegidos del sol y el agua, de preferencia hacer el bocashi en un lugar protegido y evitar taparlo. Además, se debe medir la temperatura todos los días, la cual debe sobrepasar los 60 grados centígrados. Por falta de termostato se aconseja realizar la prueba del corbo que consistirá en introducirlo dentro del bocashi y si este sale caliente significa que aún no está listo, tiene que salir a temperatura ambiente para ser utilizado en los cultivos frutícolas. Seguir leyendo